Historia

Pese a la existencia de vestigios anteriores, la colonización extensiva del territorio no se produce hasta la edad del bronce. Las evidencias de la cultura ibérica son numerosas, dispersas y tardías, y provienen de la disgregación de asentamientos concentrados en otros sitios de las proximidades, por el impacto de la romanización. En Els Alforins son significativas las muestras materiales de época romana, con presencia e intensidad desiguales entre los siglos ii anterior y v posterior a la nuestra era, momento a partir del cual el paraje se despuebla por el resto del milenio.

De la época medieval hispanomusulmana, la información es escasa, a pesar del origen árabe del nombre que envuelve nuestro pueblo, Alforí, derivado del étimo al-hurï: granero o depósito de grano. El único asentamiento hispanomusulmán en proceso de estudio se encuentra junto al casco urbano, y su cronología abarca desde finales del siglo x hasta mediados del xii.

Después de haber ocupado Ontinyent, hacia 1245, Jaime I se reserva El Alforí como parte integrante del Real Patrimonio. Hasta enero de 1257, en que el Conquistador hace donación al pueblo de Ontinyent de aquella extensa porción de territorio, que entonces comprendía desde el puerto de Els Alforins, hacia poniente, hasta el límite con Castilla: en Bogarra, en el actual término de Caudete.

El 1335 se inicia la cruenta disputa territorial del pleito de los Alhorines entre Villena y Ontinyent. La sucesión de incidentes, con incursiones armadas por ambas partes, y la perduración del litigio en los tribunales conducirán al fraccionamiento de la subcomarca dos siglos más tarde: una sentencia arbitral de 1502, parte L’Alforí en dos por la vereda de La Safra, con la adscripción de la parte occidental a la villa castellana de Villena y la oriental a la de Ontinyent.

La calma posterior revitalizó el poblamiento, con la extensión de la actividad agrícola y la construcción de algunas casas de campo, hasta el punto que los propietarios de las heredades le pidieran al Consell de la villa de Ontinyent en 1520 poder edificar una ermita en Els Alforins. La coincidencia entre la iniciativa de erigir la ermita y el estallido de la Germanía (1519-1522), ralentizaron y paralizaron la obra durante décadas. Hasta 1593, en que el propio Consell determinó que se llevara a término la ermita de Sant Antoni de Els Alforins de Ontinyent. Aquel remoto centro de culto fue el aglutinador de los orígenes del casco urbano y es el antecedente del actual templo parroquial de Nuestra Señora del Rosario de Fontanars dels Alforins.

Fontanars cap a 1906

Fontanars dels Alforins cap a 1906

La Guerra de Sucesión tendría para L’Alforí un efecto de despoblamiento, primero, y de sustitución poblacional con posterioridad a la batalla de Almansa. Parte de los actuales habitantes de Fontanars son descendientes directos de aquellos nuevos colonos, venidos mayormente de las villas borbónicas de La Foia de Castalla, de Banyeres de Mariola o de Biar, a partir de 1707. Con todo, durante el siglo xvii y xviii el número de casas y pobladores crece en L’Alforí pausadamente. Hasta el siglo xix, en que la población aumenta de los 400 habitantes de 1820 a los 1.100 registrados en 1867.

Campanar en la actualidad. Foto Pepe Gandía

Campanario en la actualidad. Foto Pepe Gandía.

Fontanars es también el municipio más joven de La Vall d’Albaida, creado en 1927 con las cuatro partidas de Els Alforins, segregadas del término de Ontinyent por el Real Decreto-Ley de 5 de agosto. Los pocos años del municipio, las características de su poblamiento y el hecho de que el desarrollo urbanístico más intensivo sea tan reciente han dado lugar a un urbanismo de calles amplias y rectilíneas con domicilios confortables, pero desprovisto de edificios monumentales con valores arquitectónicos, históricos y artísticos relevantes. Con la excepción del templo parroquial, que es el resultado de las sucesivas ampliaciones aplicadas a la ermita originaria de finales del siglo xvi, y del campanario. La altura de la torre inicial de la iglesia de Fontanars (1860-1862), era 2/3 de la actual. El aspecto que ahora presenta la torre de las campanas es el resultado de la reconstrucción parcial y del singular remate de que fue objeto entre 1915 y 1916, a cargo del arquitecto de Valencia José M.ª Manuel Cortina Pérez.

El padrón municipal referido a diciembre de 1927 reúne 1.256 habitantes, el 75% de los cuales habitaban el centenar de casas localizadas en las heredades repartidas por el término. La tasa máxima de población se alcanza en 1944, con 1.317 habitantes. A partir de la década de los sesenta del siglo xx se intensifica la concentración en el casco urbano de las familias campesinas. Paralelamente, el núcleo se triplica y crece la desafección a la ruralidad de sus vecinos. Actualmente, con la población estabilizada alrededor del millar de individuos desde 1975, los principales recursos de los habitantes de Fontanars son la agricultura, la construcción y los servicios y, en menor medida, la industria.

El 28 de abril de 1992, el Gobierno valenciano aprobó el cambio de denominación oficial del municipio de Fontanares por Fontanars dels Alforins, que es una combinación del nombre más común, Fontanars, con el histórico, que oscila entre el Alforí y los Alforins.